Rusia acusó este jueves a Estados Unidos de una aplicación extraterritorial de la legislación nacional en el caso de la detención de varios altos responsables de la FIFA acusados de corrupción.
"Advertimos sobre la existencia de un nuevo caso de aplicación ilegal y extraterritorial de la legislación estadounidense", dijo Alexandr Lukashévich, portavoz de la Cancillería rusa, en un comunicado.
El diplomático destaca que la Justicia norteamericana acusa a "un grupo de personas, que representan a diferentes Estados" de "medio centenar de casos de maquinaciones financieras".
Rusia ha acusado en numerosas ocasiones a EEUU de uso extraterritorial de su legislación para extraditar ciudadanos de otros países, como fue el caso de "El mercader de la muerte", el traficante de armas ruso Víktor But.
El líder ruso, Vladímir Putin, fue más lejos y afirmó que las detenciones son un intento de boicotear el Mundial de 2018 y bloquear la reelección como presidente de Joseph Blatter, quien habría sido presionado para impedir la celebración del Mundial de Fútbol en Rusia en 2018.
El jefe del Kremlin también consideró "raros" los arrestos y acusó a Estados Unidos de perseguir fines interesados con ellos.
Putin consideró que "quizás alguno de ellos ha violado alguna ley, no sé, pero lo que es seguro es que EEUU no tiene ninguna relación con esto. Estos funcionarios no son ciudadanos estadounidenses. Y si ocurrió algo, eso no ocurrió en territorio de EEUU".
"Esto es otro claro intento de EEUU de extender su jurisdicción a otros Estados", añadió Putin.
Dicho esto, el líder ruso insistió en que "si son o no culpables, esto se tendrá que demostrar en un juicio. Y solo después de esto se podrá hablar, incluso en el caso de que finalmente sea EEUU el país que los enjuicie.
Posición de EEUU
Por su parte, el departamento de Justicia de EEUU se ratifica en su competencia e hizo público hoy un comunicado en el que anuncia que han sido presentadas 47 acusaciones contra 14 personas por "organización mafiosa, fraude masivo y blanqueo de dinero, entre otros".
La ley que invoca EEUU para intervenir en este caso es la conocida como “RICO” (Racketeer Influenced and Corrupt Organizations -Ley de “Chantaje Civil, Influencia y Organizaciones Corruptas-), implantada en Estados Unidos en la lucha contra las organizaciones criminales y mafiosas, cuya entrada en vigor data de 1970, y que contempla actualmente veintinueve delitos federales y ocho estatales, entre otros, delitos de fraude fiscal, chantaje, extorsión y lavado de dinero, añadiendo que tales delitos conllevan una pena que va desde una multa de veinticinco mil dólares hasta 20 años de prisión, con pérdida del derecho a disponer de los fondos e intereses obtenidos como resultado de dicha actividad criminal y embargo de bienes, reseñando que es sin duda, una de las normativas federales más severas del país.
En noticia que publicábamos en IUSPORT ayer, se indicaba que la fiscal general había precisado que los detenidos planearon parte de su actividad delictiva en reuniones celebradas en Estados Unidos, además de usar el sistema bancario de dicho país para distribuir los sobornos, información a la que igualmente aluden otros medios, precisando que para la justicia norteamericana, los delitos fueron cometidos en su territorio, y los autores de los mismos tienen que rendir cuentas ante los tribunales norteamericanos, acudiendo para ello al tratado bilateral de extradición que entró en vigor en 1997 entre Suiza y Estados Unidos.
Como antecedente de la aplicación de la reiterada Ley podemos citar la demanda interpuesta en diciembre de 2012 por Petróleos Mexicanos (Pemex), contra las empresas Siemens y Sk. Engineering and Construction por actos presuntamente fraudulentos e ilegales, argumentando que dichas compañías violaron la Ley “RICO”.
Epílogo
Dicho lo anterior, ello no legitima a Blatter para continuar al frente de la organización internacional. El diario The New York Times dedicó hoy su editorial principal al escándalo de corrupción en la FIFA y afirmó que, como primer paso, debería decidirse la "destitución" del presidente de la organización, Joseph Blatter.
El editorial, titulado "Manchas en un hermoso deporte", se refiere al anuncio hecho el miércoles por la Fiscalía General de Estados Unidos para acusar a 14 personas supuestamente ligadas con una red de crimen organizado, corrupción y lavado de dinero.
Blatter, dice el diario, "no ha visto razón alguna para no aspirar el viernes a un quinto mandato (al frente de la FIFA) y no ha mostrado intención de revisar la elección de Rusia y Qatar" para la Copa Mundial de 2018 y la de 2022, respectivamente.
"Esta vez no se debería permitir a la FIFA que pretenda que el problema afecta a unos pocos empleados corruptos. El primer paso es la inmediata destitución del Sr. Blatter y la reestructuración de la FIFA", agrega el editorial.
El diario dice que la selección de Rusia y de Qatar debería ser examinada de nuevo "rigurosamente", y aprovechó para recordar las malas condiciones en las que trabajan los extranjeros empleados por el país árabe para preparar las instalaciones del Mundial de 2022.
El Times recuerda que el "complicado e impenetrable" mundo de la FIFA generó unos ingresos de 5.700 millones de dólares entre 2011 y 2014, y aun así, "opera mayormente detrás de puertas cerradas".